Entrevista de posguerra

Esta semana, el comentario de Proyecto de Integrado trata sobre una entrevista que teníamos que hacer sobre que les pareció la exposición sobre la posguerra a la que asistieron el pasado viernes nustros padres y algunos abuelos.

Para hacer la entrevista elegí a mi padre, que es la persona que más cercana en el tiempo se encontraba de la posguerra y que además había asistido a la exposición.

Empecé preguntándole qué le había parecido en general la exposicón de fotos y el vídeo, y me respondió que le había gustado bastante porque a pesar de que cuando el empezó realmente a entender el mundo y lo que pasaba, con 10 o 12 años, ya habían transcurrido varios años de la década de los 40, había multitud de cosas que le recordaban a su infancia: los arados, la forma de vestir con la que aparecíamos..., ya que, aunque no vivió muchas de las cosas de las que fueron retratadas en el vídeo, si que las conocía de escuchar hablar a sus padre y tíos.
Luego, a la pregunta: “¿Qué aspectos de los que se muestran en el vídeo podrías haber vivido y no viviste?”; él me contestó que el tema de la migración no lo sufrió nadie de su familia porque, aunque justos, nunca les fue del todo mal.

La siguiente pregunta fue: “¿Te trajeron las fotos o el vídeo al gun recuerdo de tu infancia?”. Él me contestó que por supuesto, por ejemplo, empezó a recordar que la gente de la época que trabajaba en el campo estaba muy undia, casi casi formando una gran familia, en contraposición de la gente de hoy, que cada uno va a su bola. Luego había una foto, en la que aparecían 20 o 30 niños que junto a sus maestros, estaban enfrente de una bandera española, y le recrdó que cada mañana justo antes de empezar la jornada escolar, cantaban “El canto de cara al sol”, que ensalzaba las hazañas bélicas del régimen.

Luego le pedí que sacra conclusiones generales de la exposición, y me dijo que le gusta que todavía se hagan cosas, y sobre todo en gente de nuestra edad para recordar que España lo pasó muy mal durante demasiados años, y que es algo que no puede olvidar para que no se repita esta situación nunca más, y para que nosotros nos demos cuenta de cuantas penalidades tuvieron que pasar ellos, nuestros padres y abuelos, y que a pesar de ello siguieron adelante.